lunes, 28 de septiembre de 2009

Hábitats de Chile: Estepa patagónica

Corresponde a la llamada “pampa patagónica”, famosa por su ovejería, y se trata de sectores de topografía muy plana –de muy baja precipitación y temperatura–, barridos por fuertes vientos.


Estas condiciones otorgan al área un aspecto de desierto frío, dominado por especies como el coirón y algunos arbustos como el calafate y la mata negra. La fauna más característica es el Ñandú y el Guanaco, y algunos gansos silvestres como el caiquén.


Hábitats de Chile: Bosque patagónico

Se extiende en aquel sector de los Andes Australes (XI y XII Región), donde las precipitaciones de lluvia son relativamente bajas –350 mm anuales-, la nieve es abundante en invierno y las temperaturas son bajas durante todo el año.

Es un bosque representado por especies de hoja pequeña y caduca, como la lenga y el ñirre.
Entre la fauna, destacan aves como la catita austral y el tijeral.

Hábitats de Chile: Bosque siempreverde

Se caracteriza por presentar precipitaciones muy altas y temperaturas relativamente bajas y estables, lo que constituye una limitante para el desarrollo de la vegetación.

Tiene una amplia distribución, que abarca desde sectores montañosos –de ambas cordilleras– en la X Región hasta los archipiélagos de Aysén y Magallanes.

Las especies más características son el alerce, ciprés de las guaytecas, el coihue de magallanes, el mañío y la leña dura.

Hábitats de Chile: Bosque valdiviano

Se extiende desde la provincia de Valdivia hasta Chiloé, y corresponde a una formación boscosa de árboles de hoja perenne, que crecen en un clima que es lluvioso todo el año, con temperaturas sin grandes oscilaciones.
Es muy rico en especies arbóreas, entre las que destacan el olivillo, el ulmo, el tineo, el lingue, la tepa, el coihue, el mañío, el avellano, el arrayán y el canelo. Además, existen numerosos helechos y enredaderas.
La fauna está representada por aves como el chucao, el huet-huet, el pájaro carpintero; y mamíferos como la güiña, el pudú, el puma y el monito del monte.

Hábitats de Chile: Bosque andino

Corresponde a aquellos bosques que se ubican en la alta cordillera de la VIII a la X Región, cuya característica principal es tener veranos relativamente cálidos e inviernos con fuertes precipitaciones de nieve.

Las especies más características son la araucaria, el coihue y la lenga. Entre la fauna, destacan el puma, el pudú, el marsupial monito del monte; y aves como el aguilucho, el pájaro carpintero y el choroy.

Hábitats de Chile: Bosque caducifolio

Este hábitat tiene una distribución muy extensa, desde aproximadamente la latitud de Valparaíso hasta la de Osorno, ocupando por el norte posiciones montañosas sobre los 800 a 1000 m sobre el nivel del mar, para –hacia el sur– ir progresivamente ocupando la depresión intermedia. Se caracteriza por la presencia de árboles de hoja caduca, y su composición va cambiando en la medida que se avanza hacia el sur, pudiéndose diferenciar algunas zonas geográficas:
Entre las regiones V y Metropolitana, se encuentran bosques de roble blanco y peumo; en la VI región, bosques de roble y maqui, y de ciprés y roble; en la VII Región, bosques de hualo; en la VIII, de roble y mañío de hojas largas; en la IX Región, de roble y coihue; y en la X, de roble y laurel. Además, en los sectores cordilleranos de la VIII a la X Región, se distribuye un bosque de roble, raulí y coihue. En este tipo de bosques, de la VII Región al sur, es común encontrar copihues. El patrón de la fauna es muy similar al del hábitat anterior, agregándose en éste algunas especies como el pudú y el puma.


Hábitats de Chile: Matorral y Bosque esclerófilo

Esta región –que contiene la mayor densidad poblacional del país y la mayor concentración de actividad agrícola, lo que ha determinado un alto grado de alteración de la vegetación natural–, se extiende a través de la zona central de Chile. En ella se dan las típicas condiciones de clima mediterráneo, esto es, inviernos fríos y lluviosos y veranos cálidos y secos.

Aquí, la diversidad vegetal es alta, con variadas formas de vida como cactus, arbustos bajos, arbustos espinosos y árboles. El predominio de alguno de estos elementos permite diferenciar tres tipos de hábitat vegetal, los que comparten un patrón de fauna común representado por mamíferos como el zorro culpeo, el quique, el cururo y el degú; y aves como el zorzal, el chincol, la diuca, el jilguero, la tenca, el chirihue, el tordo, la loica, el queltehue, la lechuza y el chuncho.


Matorral estepario: Son aquellos sectores que presentan precipitaciones bajas e irregulares, además de una intensa presión de pastoreo y extracción de leña, que les han conferido una fisonomía de matorral con arbustos dispersos y una densa estrata de hierbas anuales. Entre las especies de flora que es posible encontrar están la alcaparra, la chamiza, el rumpiato, el incienso, el huañil, el chagual, el guayacán, el alfilerillo, el llantén, el litre, el colliguay y el quisco.

Matorral y bosque espinoso: Son áreas que se presentan muy alteradas por las actividades humanas, donde la forma de vida predominante la constituyen los arbustos espinosos, a menudo caducifolios de verano. Las especies de flora más representativas son el espino, el algarrobo, el litre, el maitén, el romerillo y diversas especies de cactus.

Bosque esclerófilo: Se extiende por las laderas de ambas cordilleras (Andes-de la Costa), y es un paisaje vegetal dominado por arbustos latos y árboles como el peumo, el molle, el litre, el boldo, el quillay, el maqui, la quila, el colliguay y el quilo. En algunos sectores de los valles costeros encontramos la palma chilena, y en sectores húmedos –como los fondos de quebradas– la patagua, el belloto, el lingue y el canelo.

viernes, 25 de septiembre de 2009

Hábitats de Chile: Estepa Alto Andina

Se encuentra en la Cordillera de los Andes, entre el extremo norte y las montañas de la VII Región. Los factores determinantes para el desarrollo de la vida son el relieve y la altitud, que determinan una fisonomía homogénea de la vegetación, dominada por pastos tipo coirón, plantas en cojín y arbustos de follaje ralo.
Fundamentalmente, se distinguen dos tipos de hábitat: El altiplano y la puna: Se ubica sobre un relieve de planicies de altura, generalmente a más de 4.000 m sobre el nivel del mar. Predomina un régimen climático de influencias tropicales con lluvias de verano (invierno boliviano). Entre las especies de flora destacan varias especies de coirón, como la tola, la llareta y la queñoa. La fauna asociada es muy rica, destacándose el quirquincho, el guanaco, la vicuña, la chinchilla, el huemul del norte y el puma. Entre las aves, la parina o flamenco, el suri o avestruz y el cóndor.


Andes mediterráneos: Corresponde a un territorio donde predominan las precipitaciones de invierno –en un gradiente que aumenta de norte a sur– y que se caracteriza por un relieve abrupto y montañoso. Las especies vegetales más típicas son el coirón, el pingo pingo, el franjel, el ciprés y la llareta. La fauna está representada por el guanaco, el zorro y el puma.

lunes, 21 de septiembre de 2009

Hábitats de Chile: Región del desierto

Ya conociendo que es un hábitat, comenzaremos a conocer los hábitats de nuestro país.


Región del desierto: Se extiende desde el extremo norte hasta el río Elqui; aunque tiene como límite oeste la costa oceánica, es principalmente un desierto interior, que abarca los abruptos acantilados costeros, las serranías de la Cordillera de la Costa, las grandes depresiones interiores y las laderas occidentales de la Cordillera de los Andes. Por sus características geográficas, se divide en cuatro formas de hábitat:






  1. Desierto absoluto: Corresponde a aquella parte del desierto en que las precipitaciones son insignificantes y la disponibilidad de agua es de carácter local, proviniendo de napas o aluviones ocasionales que descienden de la cordillera. Se califica como desierto absoluto pues la vida vegetal –salvo en condiciones muy particulares- está prácticamente ausente. En aquellos escasos lugares donde se dan las condiciones para el desarrollo de alguna vegetación, se puede encontrar tamarugo, algarrobo blanco o chañar. La fauna es escasa.


  2. Desierto andino: Se ubica en las laderas occidentales de la Cordillera de los Andes, entre los 1.800 y 3.500 m sobre el nivel del mar. Gracias a las precipitaciones en la alta cordillera, presenta ciertas posibilidades para el desarrollo de especies vegetales como el cactus candelabro, el cachiyuyo y el chañar. La fauna es escasa, pudiendo encontrarse zorro chilla, zorro culpeo y guanaco.


  3. Desierto costero: Se ubica a lo largo de la costa y en las laderas occidentales de la Cordillera de la Costa, desde el nivel del mar hasta los 1.500 m. Aquí, la acción favorable de las frecuentes neblinas costeras o “camanchacas” otorga mejores condiciones para la vida vegetal, en la que destacan los cactus y otras especies como el churque, la alcaparra, la chamiza y el suspiro. Aquí la fauna es algo más abundante, encontrándose mamíferos como el zorro culpeo y chilla, el lobo de mar y el chungungo en los roqueríos, y el piuchén o vampiro, en las cavernas de la costa. Entre las aves destacan el pelícano, el piquero y el cormorán guanay.

  4. .Desierto florido: Se ubica entre el río Copiapó y La Serena, y su carácter esencial está determinado por la influencia de precipitaciones periódicas, suficientes para provocar el florecimiento de innumerables especies. Se puede encontrar cacho de cabra, chamiza, suspiro, algarrobilla, retamilla, pingo pingo e innumerables especies herbáceas de vistosas flores. Entre la fauna destacan los zorros y el cururo.

Chile y sus Hábitats



Antes de conocer los diferentes hábitats que se encuentran en nuestro país, comenzaremos por entender que es un Hábitat.



Hábitat: el conjunto local de condiciones geofísicas en que se desarrolla la vida de una especie o de una comunidad animal o vegetal; es decir, es el lugar donde una planta o un animal encuentran las condiciones ideales para su desarrollo.





Ya conociendo la definición general de un hábitat podemos decir que nuestro país, dada su extensión de norte a sur,la que determina una gran amplitud climática y las diferencias de altitud entre mar y cordillera, que generan variaciones en el clima local, presenta una gran diversidad de hábitats.

También podemos reconocer algunas características de los hábitats.



  1. Puede tener diferentes tamaños. Por ejemplo, el pequeño espacio que queda bajo una piedra es el hábitat de gusanos e insectos; el de un león comprende varios kilómetros cuadrados y el de una ballena puede llegar a medir miles de kilómetros.


  2. Existe una estrecha relación entre el hábitat y los seres vivos que lo ocupan. El lobo marino vive en aguas de baja temperatura, su piel se adapta al frío y la forma de sus aletas es apropiada para desplazarse tanto en el agua como en tierra firme.


  3. A menudo, un hábitat es propicio para el desarrollo de dos o más poblaciones vegetales o animales, generándose entre ellos una serie de relaciones de competencia, mutualismo o cadenas tróficas (el herbívoro come pasto; el carnívoro se come al herbívoro, etc.). El espacio en que se producen todas estas relaciones dinámicas recibe el nombre de ecosistema. En la Tierra existen variados ecosistemas que constituyen grandes hábitats: océanos, bosques tropicales, desiertos, sabanas, bosques de coníferas, tundras, altiplanos y muchos más.